por: julio 22/6/009
En la pasada edición de la Serie del Caribe, celebrada en Mexicali, México, Adrián González hizo gala de su poder ofensivo. Más tarde llegó a los entrenamientos de los Padres y su fuerza no se hizo esperar.
En la presente temporada, continúa demostrando esa versatilidad. Sus 23 cuadrangulares son solo una muestra de lo que el jugador mexicano sigue presentando, a pesar de estar estancado en esa cifra desde el pasado dos de junio.
“Hasta el momento me siento satisfecho de lo que he logrado”, dijo González a El Caribe. “Me siento bien cómodo con el bate aportando para el equipo y tratando de sobresalir como hasta el momento lo he hecho”, agregó.
Sobre cómo ha logrado desarrollar ese poder, González manifestó que todo se debe al empeño puesto desde los entrenamientos primaverales con los Padres, novena a la que llegó el cuatro de enero de 2006, tras dos temporadas con los Vigilantes de Texas, mediante un cambio que involucró al lanzador Chris Young y el jardinero Terrmel Sledge por los pitchers Adam Eaton y Akinori Otsuka, así como del receptor Billy Killian.
“A esto se le agrega la experiencia y la madurez. También a los entrenamientos de pesas que he tenido junto al preparador físico Jim Malone. Todo eso unido ha dado como resultado el poder que he presentado con el equipo este año”, dijo el inicialista, quien tiene una carrera de cinco años en las Grandes Ligas.
Indicó que para esta temporada no ha realizado nada diferente en lograr el poder que hasta el momento ha demostrado.
“Hasta ahora todo ha sido lo mismo. Seguir tratando de hacerle swing a la pelota. Mi swing no ha cambiado, sigue siendo el mismo.
No he alterado nada. Todo eso me ha llevado a tener mejor contacto con la pelota”, expresó el jugador nacido en San Diego, pero de padres mexicanos y que debutó el 18 de abril de 2004 en el partido en que los Vigilantes de Texas cayeron 4-2 ante los Marineros de Seattle.
En ese encuentro se fue de 3-0. Asimismo, indicó que no ha realizado ningún ajuste a su mecánica de bateo, lo que, a su juicio, le ha dado buenos resultados, debido a que se proclama un bateador natural.
“La verdad es que el único ajuste que he hecho ante los lanzadores es sentirme mejor en la caja de bateo. Cada vez que agoto un turno me relajo, no me pongo presión y solo esperar el lanzamiento que entiendo debe de pegarle”, dijo González, que este año devengará un sueldo de 3,125,000 dólares.Observación. Otro de los factores que ha llevado a González a desarrollar todo su talento en el béisbol de las Grandes Ligas es observar los videos de juegos anteriores y hacer comparación sobre los puntos a mejorar en el partido siguiente.
“A través de los videos estudio mucho a los lanzadores, en especial, los abridores, con el objetivo de encontrar lo que en el próximo juego necesito. Ver los videos para mí ha sido una rutina y gracias a Dios me ha dado buenos resultados”, enfatizó el primera base.
También se mostró satisfecho por la temporada que hasta el momento está desarrollando con los Padres, novena que registra una racha de dos derrotas seguidas, ocupando así el cuarto lugar del Oeste de la Nacional.
“Por un lado sí, pero por el otro no al cien por ciento, por que el equipo está a nueve juegos por debajo de los .500 (.452).
Tampoco me siento mal por la forma en que hemos estado jugando con tal de dar la pelea y avanzar más allá de la temporada regular”, sostuvo.
En la actualidad, el inicialista registra un promedio de bateo de .280, con 23 cuadrangulares y 45 carreras remolcadas en partidos con los Padres, unido a 48 ponches.
Adrián y su sueño
Todo jugador siempre tiene una meta una vez inicia la temporada de las Grandes Ligas. Algunos sostienen que les gustaría dar una cantidad considerable de cuadrangulares; mientras que otros quisieran establecer cualquier tipo de marca personal.
Para González, ayudar al equipo a ganar es la meta más significativa que ha presentado desde que se inauguró la campaña el pasado cinco de abril del presente año.
“Ese es mi deseo, también está el poder llegar a los playoffs. A pesar de todo eso, la única realidad que tengo es poder ayudar al equipo a ganar y trabajaremos a todo vapor para alcanzar ese objetivo, que sé que con la ayuda de todos nosotros lo lograremos”, indicó el jugador de 27 años.
Al preguntársele si se visualiza conectando más de 40 jonrones y remolcando más de 100 carreras, González manifestó que no se considera un jugador de trazar metas personales.
“Lo único que sé es trabajar todos los días y estar bien preparado para cuando llegue el juego y dar el cien por ciento de mí en el terreno de juego a favor del equipo. Si logré esas cifras me sentiría muy satisfecho y si no lo logro, también”, puntualizó el primera base.
En la presente temporada, continúa demostrando esa versatilidad. Sus 23 cuadrangulares son solo una muestra de lo que el jugador mexicano sigue presentando, a pesar de estar estancado en esa cifra desde el pasado dos de junio.
“Hasta el momento me siento satisfecho de lo que he logrado”, dijo González a El Caribe. “Me siento bien cómodo con el bate aportando para el equipo y tratando de sobresalir como hasta el momento lo he hecho”, agregó.
Sobre cómo ha logrado desarrollar ese poder, González manifestó que todo se debe al empeño puesto desde los entrenamientos primaverales con los Padres, novena a la que llegó el cuatro de enero de 2006, tras dos temporadas con los Vigilantes de Texas, mediante un cambio que involucró al lanzador Chris Young y el jardinero Terrmel Sledge por los pitchers Adam Eaton y Akinori Otsuka, así como del receptor Billy Killian.
“A esto se le agrega la experiencia y la madurez. También a los entrenamientos de pesas que he tenido junto al preparador físico Jim Malone. Todo eso unido ha dado como resultado el poder que he presentado con el equipo este año”, dijo el inicialista, quien tiene una carrera de cinco años en las Grandes Ligas.
Indicó que para esta temporada no ha realizado nada diferente en lograr el poder que hasta el momento ha demostrado.
“Hasta ahora todo ha sido lo mismo. Seguir tratando de hacerle swing a la pelota. Mi swing no ha cambiado, sigue siendo el mismo.
No he alterado nada. Todo eso me ha llevado a tener mejor contacto con la pelota”, expresó el jugador nacido en San Diego, pero de padres mexicanos y que debutó el 18 de abril de 2004 en el partido en que los Vigilantes de Texas cayeron 4-2 ante los Marineros de Seattle.
En ese encuentro se fue de 3-0. Asimismo, indicó que no ha realizado ningún ajuste a su mecánica de bateo, lo que, a su juicio, le ha dado buenos resultados, debido a que se proclama un bateador natural.
“La verdad es que el único ajuste que he hecho ante los lanzadores es sentirme mejor en la caja de bateo. Cada vez que agoto un turno me relajo, no me pongo presión y solo esperar el lanzamiento que entiendo debe de pegarle”, dijo González, que este año devengará un sueldo de 3,125,000 dólares.Observación. Otro de los factores que ha llevado a González a desarrollar todo su talento en el béisbol de las Grandes Ligas es observar los videos de juegos anteriores y hacer comparación sobre los puntos a mejorar en el partido siguiente.
“A través de los videos estudio mucho a los lanzadores, en especial, los abridores, con el objetivo de encontrar lo que en el próximo juego necesito. Ver los videos para mí ha sido una rutina y gracias a Dios me ha dado buenos resultados”, enfatizó el primera base.
También se mostró satisfecho por la temporada que hasta el momento está desarrollando con los Padres, novena que registra una racha de dos derrotas seguidas, ocupando así el cuarto lugar del Oeste de la Nacional.
“Por un lado sí, pero por el otro no al cien por ciento, por que el equipo está a nueve juegos por debajo de los .500 (.452).
Tampoco me siento mal por la forma en que hemos estado jugando con tal de dar la pelea y avanzar más allá de la temporada regular”, sostuvo.
En la actualidad, el inicialista registra un promedio de bateo de .280, con 23 cuadrangulares y 45 carreras remolcadas en partidos con los Padres, unido a 48 ponches.
Adrián y su sueño
Todo jugador siempre tiene una meta una vez inicia la temporada de las Grandes Ligas. Algunos sostienen que les gustaría dar una cantidad considerable de cuadrangulares; mientras que otros quisieran establecer cualquier tipo de marca personal.
Para González, ayudar al equipo a ganar es la meta más significativa que ha presentado desde que se inauguró la campaña el pasado cinco de abril del presente año.
“Ese es mi deseo, también está el poder llegar a los playoffs. A pesar de todo eso, la única realidad que tengo es poder ayudar al equipo a ganar y trabajaremos a todo vapor para alcanzar ese objetivo, que sé que con la ayuda de todos nosotros lo lograremos”, indicó el jugador de 27 años.
Al preguntársele si se visualiza conectando más de 40 jonrones y remolcando más de 100 carreras, González manifestó que no se considera un jugador de trazar metas personales.
“Lo único que sé es trabajar todos los días y estar bien preparado para cuando llegue el juego y dar el cien por ciento de mí en el terreno de juego a favor del equipo. Si logré esas cifras me sentiría muy satisfecho y si no lo logro, también”, puntualizó el primera base.
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