miércoles, 27 de julio de 2016

cordillera
Santiago.- La fiebre por la extracción de ámbar, en comunidades de la cordillera Septentrional, comienza a ocasionar la desaparición de varios ríos y a afectar a propietarios de fincas para extraer el material.Inversionistas extranjeros en el mineral utilizan a dominicanos para adquirir terrenos con fines de explotarlos. 


El ambientalista Nelson Bautista asegura que al menos seis de los ríos que nacen en la cordillera se ven afectados con la reducción de sus cauces, algunos en su totalidad. Los afluentes son los de Jacagua, Gurabo, Palo Quemado y los de San Francisco de Yásica y Yaroa. Uno de los afectados por la extracción de ámbar es José Miguel Domínguez, que ha visto como retroexcavadoras han penetrado a los terrenos de la propiedad de su familia. Según Domínguez, los terrenos más afectados están ubicados en las comunidades de Palmar Limpio, Los Higos, La Cumbre y Palo Quemado.

Explotación

“A esta zona están llegando empresarios chinos y alemanes que ofrecen dinero a dueños de fincas para que les permitan extraer ámbar y así han afectado varios ríos”, expresó José Miguel Domínguez al hablar con reporteros de elCaribe. En el trayecto denominado la Ruta del Ámbar, la explotación de esa zona ocasiona el desmonte de árboles, sin que intervenga el Ministerio de Medio Ambiente. En Palo Alto y otros poblados impera la extracción del ámbar de forma rudimentaria, a pesar de que en menos de dos años ha dejado al menos cinco víctimas.

Recientemente, elCaribe publicó la situación de depredación del río Yásica, afectado por la extracción de materiales y la crianza de animales a pesar de que sus aguas son consumidas en la provincia de Puerto Plata. En la zona limítrofe entre Puerto Plata y Santiago, la labor minera ha provocado la desaparición de ríos y algunos acueductos han dejado de recibir el líquido. fuente- elcaribe.com.do
Subscribe to RSS Feed Follow me on Twitter!