Santiago.-Los residentes en las comunidades de Santiago que son más afectadas por la problemática de agua potable comienzan a recurrir hasta a procesiones. En la mañana del jueves un grupo de evangélicos, se trasladaron hasta el embalse Tavera-Bao y allí comenzaron a orar.
En el municipio como Tamboril o el distrito municipal de La Canela decena de feligreses con la imagen de la virgen y otros con cruces, recogen las calles y mediante cánticos piden a Dios terminar con la sequía.
La Canela no solo carece de acueducto, sino que debe consumir el líquido del canal de riego. Esa misma problemática enfrentan sus vecinos, los moradores del distrito municipal de Hato del Yaque.
En ambas comunidades, los feligreses han realizado al menos tres procesiones desde la pasada semana.
Lo que estamos haciendo es rezar para que dios se conduela y nos mande agua, que tanto la necesitamos”, expresa la anciana Domingas santos, residente en La Canela.
n Tamboril en lo que va de esta semana ha realizado tres caminatas o procesiones en recorridos por distintos puntos del municipio.
Tamboril junto a las comunidades de Jacagua y otros poblados de la zona Norte de Santiago, son las que presentan mayores problemas con el agua potable.
Lo que hacemos es orar para que el señor se conduela de nosotros y nos envíe la lluvia y los ríos puedan tomar agua”, expresa Carmen Domínguez residente en Tamboril.
La sequía ha borrado prácticamente tres afluentes que nacen en la cordillera septentrional.
La pasada semana, la Sociedad Ecológica del Cibao (SOECI) advirtió que los sistemas de riego están al borde del colapso por lo que advierte que el daño causado a algunos cultivos se reflejará en una sensible reducción de su productividad. Ayer, el nivel del embalse de Taveras se encontraba en 313.15 metros cúbicos sobre el nivel del mar.
Por día Taveras pierde diez centímetros y en menos de dos meses aproximadamente cuatro metros cúbicos.
Los niveles de sequía so tales, que algunos ríos sirven como carretera para la circular vehículos como el caso de Jacagua.
Coraasan espera que con la construcción del acueducto de Cienfuegos puedan solucionar la problemática. fuente-fuente-elcaribe.com.do
En el municipio como Tamboril o el distrito municipal de La Canela decena de feligreses con la imagen de la virgen y otros con cruces, recogen las calles y mediante cánticos piden a Dios terminar con la sequía.
La Canela no solo carece de acueducto, sino que debe consumir el líquido del canal de riego. Esa misma problemática enfrentan sus vecinos, los moradores del distrito municipal de Hato del Yaque.
En ambas comunidades, los feligreses han realizado al menos tres procesiones desde la pasada semana.
Lo que estamos haciendo es rezar para que dios se conduela y nos mande agua, que tanto la necesitamos”, expresa la anciana Domingas santos, residente en La Canela.
n Tamboril en lo que va de esta semana ha realizado tres caminatas o procesiones en recorridos por distintos puntos del municipio.
Tamboril junto a las comunidades de Jacagua y otros poblados de la zona Norte de Santiago, son las que presentan mayores problemas con el agua potable.
Lo que hacemos es orar para que el señor se conduela de nosotros y nos envíe la lluvia y los ríos puedan tomar agua”, expresa Carmen Domínguez residente en Tamboril.
La sequía ha borrado prácticamente tres afluentes que nacen en la cordillera septentrional.
La pasada semana, la Sociedad Ecológica del Cibao (SOECI) advirtió que los sistemas de riego están al borde del colapso por lo que advierte que el daño causado a algunos cultivos se reflejará en una sensible reducción de su productividad. Ayer, el nivel del embalse de Taveras se encontraba en 313.15 metros cúbicos sobre el nivel del mar.
Por día Taveras pierde diez centímetros y en menos de dos meses aproximadamente cuatro metros cúbicos.
Los niveles de sequía so tales, que algunos ríos sirven como carretera para la circular vehículos como el caso de Jacagua.
Coraasan espera que con la construcción del acueducto de Cienfuegos puedan solucionar la problemática. fuente-fuente-elcaribe.com.do