El ministro de Educación, Ángel Hernández, a los sectores pudiente de la sociedad dominicana asumir la educación como un proyecto nacional aportando al sistema, para asegurar una nueva generación, en la cual descansa el futuro del país.
Hablando
durante la celebración de la Novena Graduación del centro educativo Hermanas
Josefina Serrano, de la Fundación Ciudad Santa María, la cual se desarrolló en
el teatro de la Pontificia Universidad Católica Madre y Madre (PUCMM),
consideró como una necesidad, de que los sectores apoyen la educación.
En
ese sentido entiende que ese aporte debe reflejarse en los valores, los
conocimientos, las iniciativas que impulsan el desarrollo y en el tipo de
sociedad que todos queremos forjar.
Con
relación al centro educativo dijo que cuando lo visitó por primera vez, dos
cosas les llamaron la atención, primero el liderazgo de la familia Álvarez
Checo y la dedicación que han hecho ha dicho proyecto.
“Con
su talento han desarrollado un gran proyecto educativo y social en un sector
que realmente lo requiere y la segunda razón es que al estar dentro del colegio
y ver cómo funciona y sobre todo la disciplina de los educandos de ese centro,
para mí fue muy motivante”, expresó.
Recordó
que los niños cuando alguien llega al aula se paran y dicen una expresión que
no recordaba, en el momento, con mucha certeza y en verdad eso es muy
motivante, porque se nota que hay un interés en hacer la cosa bien, lo que en
definitiva es lo que necesita nuestra sociedad.
Explicó
que primero el liderazgo de personas que dediquen sus recursos y sobre todo sus
talentos apoyar los más necesitados, en este caso las escuelas públicas,
localizadas en los sectores populares.
“Y
creo que el ejemplo que ha dado la familia Álvarez-Checo y quienes les
acompañan en el proyecto desde que se inició, debe de ser un motivo para que
otros empresarios de aquí de Santiago y de otras ciudades se motiven hacer lo
mismo, apoyar la educación pública como un proyecto nacional”, subrayó.
Afirmó
que es ahí, donde estudian la mayoría del pueblo dominicano, donde actualmente
son 2 millones 71 mil alumno que van entrar el próximo lunes a las aulas y en
el sector privado alrededor de 600 mil, donde tres cuarto de esa cantidad están
en el sector público, quienes requieren lo que está haciendo esta familia, para
garantizar una educación de mayor calidad.
El
funcionario insistió en que es importante que todos los sectores asuman la
educación como un proyecto nacional, lo que significa que la actual generación
les transfiera a la siguiente lo que espera que sea la sociedad dominicana en
su conjunto.
Dijo
que se habla mucho del 4% que recibe el Ministerio de Educación, como si fuera
una cantidad enorme de recursos, son muchos, el año venidero serán RD$300 mil
millones de pesos, pero la mayoría se van en salarios, alimentación y la
seguridad social de los docentes.
Por
lo que entiende que lo fundamental de la educación es lo que se invierte en
formación y recursos, lo cual apenas alcanza menos de un 8% de la generalidad
de los recursos, recibido, por lo que ejemplo de la familia Álvarez Checo es lo
que se necesita, de gente que sean visionarios y que ven que apoyando a la
nueva generación, están construyendo su propio futuro.
Soraya
Checo de Álvarez, directora de la Fundación Santa María pronunció las palabras
de bienvenida dijo que han pasado 16 años iniciaron la labor diocesana con un
grupito de amigos que comenzaron el voluntariado, luego convirtiéndolo en una
fundación.
“Pero
hace catorce años que comenzamos a conversar, dialogar, recibir y visitar
personas involucradas, en el MINERD, incluyendo ministros, viceministros,
técnicos, directores, por la labor de la educación, ir a Santo Domingo
reunirnos, pero eso diez de noviembre del pasado 2022, nunca se me ha
olvidado”, expresó
Explicó
que ese día recibieron la visita del ministro Ángel Hernández, acompañado, por
el vice-ministro administrativo de educación, señor Julio Cordero, hombre
sencillo y afable, por lo que los presentes se quedaron perplejos, de manera
positiva y eso dice mucho de dicho funcionario.