Santo domingo -El programa “Cero tolerancia contra las drogas” de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) desmantela diariamente entre 40 a 45 puntos de drogas, pero enfrenta el problema de que no se apresan a los pejes gordos, sino a sus empleados.
El portavoz de la DNCD, Roberto Lebrón, afirmó que ese organismo, Policía Nacional y Ministerio Público trabajan para corregir la debilidad en el proceso de desmantelamiento de los puntos de drogas, para evitar que los dueños del negocio se muevan a otro lado.
Informó que se está estructurando un mecanismo para dar con los pejes gordos y eliminar el mal de raíz.
“Hay un problema muy serio. Por ejemplo, a un individuo lo detienen en su punto de drogas, sólo a él, pero él tiene otra gente, el jefe del punto regularmente no está en el lugar, sino sus empleados, pero él se va, se traslada para otro lado”, manifestó Lebrón.
El vocero del organismo antinarcótico insistió en que “el asedio de la Policía y la DNCD lo que hace es que empuja muchas veces al dueño de la droga, al dueño del punto, porque muchas veces lo que se hace es que se agarran los empleados de él, entonces lo que hace es que se traslada y eso no quiere decir que no se trabaja”.
Roberto Lebrón explicó que el programa de lucha contra las drogas se enmarca dentro de las medidas del Plan Barrio Seguro bajo la coordinación de la Secretaría de Interior y Policía y participan, además, la DNCD, el Ejército Nacional, la Policía y la Procuraduría General de la República.
Dijo que, además, todos los organismos de inteligencia de los cuerpos castrenses participan en el proceso de espionaje para detectar los puntos de venta de drogas
El portavoz de la DNCD, Roberto Lebrón, afirmó que ese organismo, Policía Nacional y Ministerio Público trabajan para corregir la debilidad en el proceso de desmantelamiento de los puntos de drogas, para evitar que los dueños del negocio se muevan a otro lado.
Informó que se está estructurando un mecanismo para dar con los pejes gordos y eliminar el mal de raíz.
“Hay un problema muy serio. Por ejemplo, a un individuo lo detienen en su punto de drogas, sólo a él, pero él tiene otra gente, el jefe del punto regularmente no está en el lugar, sino sus empleados, pero él se va, se traslada para otro lado”, manifestó Lebrón.
El vocero del organismo antinarcótico insistió en que “el asedio de la Policía y la DNCD lo que hace es que empuja muchas veces al dueño de la droga, al dueño del punto, porque muchas veces lo que se hace es que se agarran los empleados de él, entonces lo que hace es que se traslada y eso no quiere decir que no se trabaja”.
Roberto Lebrón explicó que el programa de lucha contra las drogas se enmarca dentro de las medidas del Plan Barrio Seguro bajo la coordinación de la Secretaría de Interior y Policía y participan, además, la DNCD, el Ejército Nacional, la Policía y la Procuraduría General de la República.
Dijo que, además, todos los organismos de inteligencia de los cuerpos castrenses participan en el proceso de espionaje para detectar los puntos de venta de drogas
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