Santo Domingo.- “Nuestra Policía Nacional permaneció inalterable desde su fundación, es decir casi 80 años. Sí, ocho décadas usando los mismos métodos tradicionales, represivos y reactivos con que fue creada”, admitió hoy el jefe policial, mayor general Manuel Castro Castillo.
Ante sus palabras de apertura en el Primer Foro sobre Reforma Policial, el alto oficial dijo que este estado inerte ha provocado producir una reforma, que se adapte a un combate efectivo de las nuevas modalidades criminales, para garantizar la confianza y la seguridad ciudadana.
“Para superar casi 80 años de atraso institucional, la Jefatura de la Policía que me honro en presidir, contando con la confianza, estamos implementando un nuevo modelo de gestión policial, el cual está encaminado a producir la reforma de hecho, para dejar atrás la Policía mediocre, en la que no se puede confiar, a fin de crear la nueva policía de proximidad y resultados proactivos, para que junto a la Reforma de la Ley Institucional 96-04, sea posible dar vida a la reforma policial que el pueblo dominicano exige y que tanto se merece”, enfatizó.
El jefe de la Policía sostuvo que una reforma policial lleva consigo indispensablemente un cambio estructural en todos los órdenes, pero sobre todo en la cultura y calidad de vida de los agentes, un cambio significativo en la rutina de trabajo de los que prestan servicio en las calles, las unidades y los destacamentos, entre otros factores.
Castro Castillo aclaró que a lo interno de la institución policial no se hace resistencia al cambio, tras afirmar que la Policía Nacional es una institución jerarquizada y disciplinada. Aunque reconoció que los reclamos y exigencias de nuestra sociedad han obligado a varios de los jefes de Policía que lo antecedieron, a iniciar procesos de transformaciones que han arribado a resultados positivos.
“Pero la falta de una efectiva estrategia de comunicación ha dado pie a un tímido reconocimiento de la sociedad dominicana, lo que hace que se mantenga la alta percepción de que los policías se resisten al cambio”, explicó.
Mientras que al participar del cónclave, la directora en el país de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), Alesandria Panehal; el representante del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), Lorenzo Jiménez de Luis; la presidenta de Participación Ciudadana, Rosalía Sosa y el vicepresidente ejecutivo de la Fundación Institucionalidad y Justicia (Finjus), Servio Tulio Castaños, coincidieron en abogar porque esa reforma se materialice y con ella se dignifique la calidad de vida de los miembros de la uniformada. fuente-listindiario.com
Ante sus palabras de apertura en el Primer Foro sobre Reforma Policial, el alto oficial dijo que este estado inerte ha provocado producir una reforma, que se adapte a un combate efectivo de las nuevas modalidades criminales, para garantizar la confianza y la seguridad ciudadana.
“Para superar casi 80 años de atraso institucional, la Jefatura de la Policía que me honro en presidir, contando con la confianza, estamos implementando un nuevo modelo de gestión policial, el cual está encaminado a producir la reforma de hecho, para dejar atrás la Policía mediocre, en la que no se puede confiar, a fin de crear la nueva policía de proximidad y resultados proactivos, para que junto a la Reforma de la Ley Institucional 96-04, sea posible dar vida a la reforma policial que el pueblo dominicano exige y que tanto se merece”, enfatizó.
El jefe de la Policía sostuvo que una reforma policial lleva consigo indispensablemente un cambio estructural en todos los órdenes, pero sobre todo en la cultura y calidad de vida de los agentes, un cambio significativo en la rutina de trabajo de los que prestan servicio en las calles, las unidades y los destacamentos, entre otros factores.
Castro Castillo aclaró que a lo interno de la institución policial no se hace resistencia al cambio, tras afirmar que la Policía Nacional es una institución jerarquizada y disciplinada. Aunque reconoció que los reclamos y exigencias de nuestra sociedad han obligado a varios de los jefes de Policía que lo antecedieron, a iniciar procesos de transformaciones que han arribado a resultados positivos.
“Pero la falta de una efectiva estrategia de comunicación ha dado pie a un tímido reconocimiento de la sociedad dominicana, lo que hace que se mantenga la alta percepción de que los policías se resisten al cambio”, explicó.
Mientras que al participar del cónclave, la directora en el país de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), Alesandria Panehal; el representante del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), Lorenzo Jiménez de Luis; la presidenta de Participación Ciudadana, Rosalía Sosa y el vicepresidente ejecutivo de la Fundación Institucionalidad y Justicia (Finjus), Servio Tulio Castaños, coincidieron en abogar porque esa reforma se materialice y con ella se dignifique la calidad de vida de los miembros de la uniformada. fuente-listindiario.com