La declaración quedó registrada en un video que circula ampliamente en redes sociales, captado en medio de una manifestación donde ciudadanos expresaban su indignación por las medidas judiciales aplicadas a los implicados en el caso, considerado uno de los más graves escándalos de presunta corrupción en el sector salud.
Las expresiones del jurista han sido calificadas por diversos sectores como irresponsables y provocadoras, al entender que promueven la represión violenta contra el derecho ciudadano a la protesta pacífica. En plataformas digitales, múltiples voces han exigido explicaciones y consecuencias, al considerar que sus palabras constituyen una grave afrenta a las libertades públicas.
El hecho se produce en un contexto de creciente tensión social, marcado por el descontento popular ante decisiones judiciales que, según amplios sectores, benefician a los poderosos, reforzando la percepción de que la justicia no se aplica de manera igualitaria.



